Cafetera magica

 Contare una historia llamada LA CAFETERA MAGICA. Si me extiendo es para no parecer demasiado anormal, puedo seguir siéndolo pero creo que ya un poquito menos. Mi único consuelo es creer haber aprendido algo de toda esta experiencia. 


Yo llevaba UN AÑO Y MEDIO sin salir de casa enganchado a un massive multiplayer role playing game, o sea como el WoW pero lo que habia antes. Todavia no se estilaba lo de los streamings y fue una lastima porque yo estaba 24/7 todo el rato enganchado.

Mis amigos lograron sacarme de mi autoencierro y conocí a una amiga de una amiga, llamemosla X. Flechazo es decir poco. Ella acaba de independizarse y se estaba arreglando un piso. Yo me ofrecí a echarle una mano y al día siguiente, sábado,  me tenia en su casa pintando paredes, arreglando persianas y todo lo que se terciase. Como yo era muy anormal (pero mucho) no capte las primeras señales de que yo ya llevaba mucho rato en su casa. Para comer fue una amiga suya y ella dijo de parar y yo, creyendo que era una idea magnifica, seguí reformándole la casa “No os preocupéis chicas yo lo hago todo.” En mi cerebro era espectacular. Por la tarde aviso a una amiga común. Esta me llevo a un aparte y me explico que podía parar ya porque X estaba colada por un conocido nuestro. ¿He dicho que era muy anormal? Despues de decirme eso yo solo empece a enumerar los múltiples defectos del susodicho y no quedarme en absoluto con el contexto. Nuestra amiga común me dio por imposible. Finalmente se hizo tarde y ya si o si me tenia que ir.

- Bueno, quedaremos para tomar un café si eso.- Le dije yo a X en el umbral de su casa.

- Es que no tengo cafetera. Ademas BLA BLA BLA BLA

Conforme dijo la primera frase mi atención se desconecto, Mi cerebro galaxia habia tenido una idea alucinante. Le conseguiría una cafetera y al día siguiente le daría la SORPRESA de aparecer con ella. Era un plan a todas luces INFALIBLE. La cafetera era la pieza clave que faltaba para empezar una relación increíble. Aquello seria la anécdota graciosa que contaríamos a los nietos de nuestros nietos.

Me despedí y salí corriendo porque estaba a punto de cerrar el super. Compre la cafetera y un paquete de café. Estaba alucinando con las perspectivas.

Al día siguiente me presente a su casa. Llame y me abrieron sin preguntar. Dentro estaba prácticamente toda su familia, muy serios todos. Ella se asomo del interior de la casa y me dijo:

- ¿QUE HACES TÚ AQUI?

Entonces mi cerebro de persona muy anormal recuperó la información del BLA BLA BLA BLA que era: “aunque quisiera (que no es para nada el caso) no puedo quedar contigo, mañana viene mi familia porque hemos quedado aqui para ir juntos al Tanatorio (porque es mi casa la que pilla mas cerca) ya que mi tía abuela ha fallecido.” 

Toda su familia se me quedo mirando. Yo, con la cafetera en la mano, aun tuve el valor de preguntar si alguien quería café. X me saco con firmeza de allí y jamas volvimos a quedar juntos.

Durante meses, años, y aun hoy en día en los círculos de conocidos asoma la anécdota de LA CAFETERA MAGICA y yo mismo la pongo de ejemplo de la importancia de ESCUCHAR y ATENDER de verdad a la persona con la que te estes relacionando.

Siento haber dado tremenda chapa. Repito que espero haber aprendido algo de todo ellos y haber pasado de ser una persona muy anormal a simplemente anormal casi funcional. Un saludo.

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