Plegadito

Hijo mío no te muevas, quédate quieto, recoge tus extremidades, todavía hace demasiado calor, saldremos a la fresca, cuando todo este tranquilo, siempre encontramos comida, a las malas buscamos en los otros escondrijos, es una lastima no aprovecharse de los vecinos que yacen en la oscuridad, no te muevas, no gastes energía, quédate plegadito, ¿has visto lo poco que ocupamos cuando estamos recogidos?, yo no me movería de mi huequecito, pero hay que salir por alimento, tenemos que hacer caca, no ahora no, esperarte a la fresca, cuando todo este tranquilito, no podemos salir ahora hijo, gastaríamos mas energía de la que podríamos encontrar, haz caso a tu padre y podrás llegar a vivir tanto como yo, quizás tengas la ocasión de encontrar hembra y tengáis niños que criar, acabaras como yo diciéndole lo mismo a tus crías, reservar la energía, plegarse como un botoncito y meterse en un huequecito, todo el día durmiendo y casi toda la noche también, o descansando, pero quietecito siempre, no debes alertar de tu presencia a los otros, no hijo no, podrían hacerte daño, nosotros siempre salimos solo un ratito cuando todos los demás duermen, cuando todo esta oscuro y solo se ve el resplandor del suelo quemado,  salir, encontrar comida, cagar y volver a nuestro refugio, una y otra vez, no puedo imaginar nada mejor, ¿has estado leyendo?, ¿libros de tacto?, ¿tiempos mejores?, ¿otra forma de vivir?, estas leyendo pura fantasía, nunca hubo un pueblo, jamás los humanos se unieron por las cosas que importaban, siempre ha sido igual, estamos tu y yo y todos los demás, yo te protejo y cuido porque eres mío, mi adorado hijo, por ninguno otro ser me preocuparía tanto, no te muevas, no tendría tanta paciencia con ninguna otra criatura, aprende a tenerla y espera a que llegue la noche.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Lena voladora